domingo, 13 de febrero de 2011

La convivencia en las aulas

Tras haber leído y analizado las ideas presentes en el texto de Juan Carlos Torrego, se podría decir que en todos los centros educativos suelen existir diversos conflictos entre sus integrantes. Para resolverlos surgen tres modelos distintos que nos llevan a su resolución.

En primer lugar encontramos el modelo punitivo, en el cual se aplica una sanción como medida principal para resolver el problema.  Unas de las principales características de este modelo son la falta de diálogo y  la desigualdad existente entre los participantes en el conflicto, de la que deriva por consiguiente el daño emocional de uno de los implicados, en este caso de la “victima”. Con respecto al “agresor”, podemos encontrar que incluso habiendo aplicado una medida de sanción en su contra, se potencie con ello su mal comportamiento.  Este modelo por tanto está orientado a hacer daño mas que ha resolver el conflicto. La autoridad que interviene en la resolución de la disputa es una autoridad malentendida.

Por otro lado, existe el modelo relacional. Con respecto al anterior, la principal diferencia que encontramos es que en este modelo aparece el dialogo entre las partes implicadas. El modelo relacional intenta superar el daño emocional y por ello el proceso que se va a llevar a cabo es el de dialogo, buscando así soluciones para la disputa. Este dialogo se realiza en privado, estando presentes los implicados en el conflicto y una autoridad que va a intentar que ambas partes lleguen a un acuerdo a la hora de resolver la disputa.
El tercer modelo que aparece es el modelo integrado. Este modelo es muy parecido al anterior pero aun así existen diferencias entre ambos. En este caso ante el conflicto aparece la figura de un docente especializado que actúa como mediador. Mientras que en el modelo relacional el profesor deja que los alumnos hablen entre ellos e intenten resolver el conflicto por ellos mismos, en el modelo integrado el profesor actúa siendo consciente de sus actos, es decir, sabe lo que hacer en cada momento para que la disputa se resuelva correctamente. Pero la principal diferencia entre ambos modelos surge a la hora de reunir a las partes implicadas, ya que en el modelo integrado, al existir unas normas consensuadas, se lleva a cabo una reunión privada en la que participan los implicados en el problema, pero posteriormente se comunica al resto de los alumnos del aula la resolución del conflicto y las consecuencias que este ha tenido, es decir, se trata el tema de forma que todos sean participes.

En mi opinión, el modelo habitual que encontramos en los centros educativos es el modelo punitivo, pero creo que es el menos efectivo a la hora de resolver un conflicto porque tras realizar su aplicación no se llega a ninguna conclusión y por tanto la disputa no se resuelve. Creo que este modelo se aplica no solo en los centros, sino que también en muchas familias ante una disputa por ejemplo entre hermanos ya que  se suele aplicar un castigo  que en la mayoría de las ocasiones no  determina cual es el verdadero problema de la discusión.  Desde mi punto de vista, sobre todo en Educación Primaria se debería llevar a cabo un modelo integrado ya que, de los tres, pienso que es el más completo ya que en él participan todas las personas que se encuentran en el aula. En los institutos también se aplica normalmente el modelo punitivo y sin embargo debería producirse un dialogo entre las partes que llevará a una solución coherente del problema. Por otro lado en las universidades ante un conflicto no existe la figura de una autoridad que actué como mediador sino que son los propios afectados son los que tras reflexionar sobre el tema llegan a un punto en el que se permite resolver el problema.

En cuanto al video en el que se habla de la ley de convivencia y participación de la comunidad educativa. El tema principal del que se habla en el video es la presunción de veracidad de los profesores, es decir, que en caso de conflicto siempre es el profesor el que lleva la razón. ¿Pero es necesario tomar esta medida
Con respecto a la ley de convivencia vamos a encontrar puntos de vista a favor y otros en contra.

En primer lugar, interviene el Presidente de directores de secundaria en Galicia, el cual está totalmente de acuerdo con esta medida. Según él, con dicha ley se podrían resolver un gran número de conflictos existentes en los centros, ya no solo por parte de los alumnos si no también entre los padres.  
En la misma línea, encontramos la opinión de Celso Curras (Consejero de Educación), ya que afirma que la situación de convivencia en los centros educativos se va agravando con los años debido a que los docentes están perdiendo la autoridad. Si relacionamos estos criterios con los modelos de convivencia vistos anteriormente, podríamos decir que ambos se basan en un modelo punitivo.
Por otro lado, encontramos las opiniones de Alba Nogueira (Profesora de Derecho Administrativo) y los directores de un Centro de Reeducación y un Colegio en el que los alumnos deciden que hacer en cada momento. Para ellos esta ley es muy conservadora y supone la pérdida de los derechos de los alumnos.
Además afirman que la causa principal de los conflictos en los centros es la mala educación que la sociedad en general ofrece a los alumnos. Al contrario que en el caso anterior, en estos centros se potencia el dialogo entre los alumnos y se buscan las causas del conflicto, por lo que podríamos vincular su forma de actuar con el modelo relacional.

En mi opinión, creo esta ley de convivencia no es una ley del todo negativa, ya que con el paso de los años se está perdiendo la autoridad de los profesores por parte ya no solo de alumnos si no de los padres. Debemos tener en cuenta que los alumnos pasan la mayor parte del dia en el colegio y por tanto si no existe una figura de autoridad alli que ofrezca al alumno modelos de buena conducta realmente lo que estaremos potenciando es todo lo contrario.

                                                                                                    

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